Mi historia de Lactancia: Eva Puerto

Es un auténtico honor poder presentaros en el día de hoy la historia de una gran mujer, de una mujer fuerte, valiente... que no se achicó ante las dificultades y decidió respetar sus deseos... decidió, continuar adelante!! Y gracias a esa fuerza de voluntad, que os va a hacer llorar mientras os deleitáis con sus palabras, hoy nos regala lo que para ella es ser una SUPERMAMÁ. Prestad atención a este maravilloso relato de Eva porque no tiene desperdicio. Os aseguro que vais a necesitar también muchísima fuerza de voluntad para contener la emoción que va a surgir conforme vais avanzando en la lectura de su historia. Sin más... disfrutad conociendo un poco de la maravillosa historia de Eva y sus hijas Eva y Noa.

Mi historia venia fraguándose desde mi infancia, jugaba con mis muñecas, les daba cariño, les consolaba... Soñaba con algún día ser madre, cambiar mis muñecas por una personita de verdad ...   pero crecí y me di de bruces con la realidad, no iba a ser tan fácil. Tras años de lucha, sufrimiento y un poco de esperanza por fin mi sueño se había hecho realidad.

Una mañana de verano me acerqué a la consulta de Amparo, - estoy embarazada, le dije... como dos palabras tan fáciles de decir habían hecho huella en mi durante 5 interminables años... ? Nos sentamos y Amparo empezó a hacerme preguntas. ¿Alimentación materna o artificial? Buena pregunta. Titubeé un momento, respondí materna, pero estaba nerviosa, en ese momento hubiera dicho también artificial.

Pasaron los meses, crecía mi barriga y mi ilusión por el ser que crecía dentro de mí... Sin darme cuenta llegaron las clases preparto.  Creo recordar que fue la tercera clase, trataba de la lactancia materna, desde el día que estuve con Amparo no había vuelto a pensar en el tema.. La clase seguía, Amparo nos explicaba los beneficios de la lactancia, todas escuchábamos en silencio y puso un vídeo...  De pronto, mi corazón dio un vuelco al ver aquella imagen.... era una mamá con su bebé recostado encima, trepaba por su cuerpo hasta llegar al pezón que succionaba con fuerza con su tierna boquita...

Reconozco que ese momento fue el punto de partida donde cambió todo, me hizo reflexionar, yo no había tomado pecho, me había criado bien pero... podría yo cambiar mis pensamientos y sentir en mi propia piel  el  acto de amor que había vivido aquella tarde?

2 de marzo de 2011:   tras horas interminables, vómitos, cansancio, vino al mundo mi pequeña Eva ... todas las mujeres deberían vivir ese momento.  No hay nada comparable, el universo me hacia justicia a tanta lucha ...., y disfrute de esa magia, ese olor a primavera que  impregnó mi alma para siempre....

Cuando sentí a mi hija encima de mi cuerpo, tan frágil, tan tierna ... otra vez vino a mi mente aquella tarde.... tímidamente la acerqué a mi pecho, pero no lo cogía. Fue Joaquin , quien suavemente la acercó a mi pecho y empezó a mamar, Indescriptible....

Me sentí una supermamá, la mujer más útil de la tierra...

Cómo había cambiado mi forma de ver la lactancia!  Desde entonces, quise sentirme una supermamá cada día ..., cada hora .., cuando mi hija me reclamaba, allí estaba yo... unas veces contenta, otras agotada ... en la segunda crisis pensé en abandonar... pero, otra vez, vino a mi mente aquella tarde...

El camino no fue fácil, nadie dijo que lo fuera, mastitis, perlas de leche, noches sin dormir, días interminables que parecía que solo dabas el pecho... Así pasaron los meses, hasta 18.

Me quedé embarazada de nuevo, los síntomas típicos del embarazo, cansancio, vómitos ... El agotamiento hizo mella en mí y con todo el dolor de mi corazón puse fin a la lactancia.  Me sentía vacía, incluso mala madre, me volqué en ella de otra forma... le daba abrazos a cambio del alimento que ya no podía ofrecerle..

12 de marzo de 2014: después de pocas horas de dolor intenso, y tras la epidural nació mi otro tesoro Noa, otra vez la misma sensación, el mismo olor a primavera...

Esta vez agarré a mi hija con decisión, piel con piel, la llevé hasta mi pecho y otra vez la mujer más útil de la tierra...

Ha habido noches sin dormir, y días interminables pero la experiencia me ha hecho saber que hacia lo correcto.

Hoy mi hija tiene 15 meses, seguimos regalándonos ese momento mágico, que es nuestro... Que nadie nos lo quite.... Que nadie os lo quite....

Este camino no es fácil, os darán consejos, unos mejores que otros , no lo toméis a mal, solo hablan desde la ignorancia. Seguid vuestro instinto y escuchad vuestro corazón.

Un beso a todas, SUPERMAMÁS!